Una de las últimas películas protagonizadas por Bob Hope, uno de los grandes cómicos del cine norteamericano. Henry Dimsdale (Hope), cajero de un banco, viudo y con siete hijos, encuentra un sobre con 10.000 dólares a la salida del supermercado. Aunque su ama de llaves, Golda (Phyllis Diller), sostiene que el dinero es ahora suyo, Henry insiste en esperar dos semanas para ver si alguien lo reclama. Cuando nadie lo hace, Henry compra un coche nuevo y un anillo de compromiso para su prometida Ellie (Shirley Eaton). Pero cuando en el banco descubren un desfalco, Henry se convierte en el principal sospechoso. Presa del pánico, coge a su familia y junto con Ellie, se dan a la fuga mientras Golda trata de ayudarles intentando que su novio policía descubra lo que ha pasado verdaderamente.