Bart Bromley (Tye Sheridan) es un joven muy inteligente que sufre un tipo de autismo que le impide relacionarse con la gente. Cuando empieza a trabajar como recepcionista en el turno de noche de un hotel, Bart utiliza cámaras de vigilancia secretas para grabar a los huéspedes en un esfuerzo por mejorar sus habilidades de interacción social. Poco después una mujer es asesinada durante su turno, pero Bart no puede revelar que sus cámaras ilegales captaron pruebas que demostrarían su inocencia. A medida que la investigación policial avanza, Bart establece una conexión personal con una hermosa huésped llamada Andrea (Ana de Armas) que podría convertirse en la próxima víctima.