1819. Los reverendos John Whipple y Abner Hale, escuchando la petición de ayuda del joven príncipe Keobi, se presentan voluntarios para llevar la palabra de Dios a Hawaii. El único requisito que deben cumplir para poder ir es estar casados. Abner consigue la mano de Jerusha, a pesar de que sigue enamorada del capitán Rafer Hoxworth, un ballenero que conoció dos años atrás pero del que hace tiempo que no sabe nada. Las costumbres hawaianas autóctonas y el proceso evangelizador que pretende llevar a cabo el reverendo Hale producen un choque cultural muy importante desde el principio. Todo se complica aún más con la llegada de un barco en el que aparece el capitán Hoxworth.