Alexander Woo: “es un final agridulce para los supervivientes”

Alexander Woo, el productor ejecutivo y showrunner de The Terror: Infamy, habla sobre la importancia del papel que ha tenido el activista George Takei en el proceso de creación de la serie, como él, junto a los guionistas, equilibraron horror y hechos históricos y la implicación de la pacífica partida de Yuko.

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P: ¿Cuál fue el mayor reto a la hora de recrear los campos de internamiento para japoneses americanos?

R: El mayor reto al que nos enfrentamos fueron las localizaciones. Con el tiempo y los recursos que teníamos debimos recrear un mundo completo, no solo los campos, también Isla Terminal y Nuevo Mexico, Japón y Dakota del Norte. Grabamos en Vancouver, que es una ciudad muy moderna, por lo que tuvimos que quitar las alarmas de humo y tapar todo lo que resultase actual. Había muchos detalles que cuidar en todas las escenas, no simplemente en las del campo, para hacer que este mundo pareciese real.

P: ¿Cuán involucrado estuvo George Takei para marcar la autenticidad de esta historia y de la producción en general?

R: George fue una gran influencia por tres razones. En primer lugar, por supuesto, como actor de nuestro reparto, consiguió una interpretación tremenda con su papel de Yamato-san, un respetado anciano de la comunidad. En segundo lugar, como consultor para la serie. No solo aportó su experiencia personal como superviviente, también se convirtió en una enciclopedia repleta de información para la serie por los conocimientos adquiridos en sus años de activismo. Muchos de los detalles y varias de las escenas están sacadas directamente de los recuerdos de George y de las personas con las que se encontró en el camino. Por último, George fue una gran inspiración para el resto del reparto y el equipo. Es, sin duda, una de las personas más importantes entre los supervivientes del internamiento, por lo que cuando todos los que no tienen una conexión directa con este episodio le veían, los inspiraba para trabajar más duro porque, como bien dijo George, este es el proyecto de su vida (conseguir la concienciación de este periodo olvidado en la historia de Estados Unidos).

P: ¿Cómo se consigue el equilibrio entre el horror ficticio y los episodios marcados por nuestra historia dentro de esta nueva temporada?

R: Ocurrió de manera más natural de lo que creía en un principio. Pensé que sería un reto complicado, y en parte lo fue, pero conforme construíamos la historia con el equipo de guionistas, nos adherimos a una norma muy sencilla: aprovecharíamos el género cuando nos ayudase a evocar las emociones en la vida de nuestros personajes. No lo haríamos solo por pertenecer a él. El objetivo principal era contar una historia que es, de hecho, terrorífica. En ocasiones, queríamos que la audiencia sintiera el horror de las experiencias que estaban marcando a los personajes. Entonces utilizábamos el elemento del terror en nuestra serie. Además, el elemento sobrenatural es algo que está presente en esta generación inmigrante. Es Chester quien al principio no cree y debe reconectar con la cultura japonesa para confrontar lo que está ocurriendo en su comunidad. La inclusión de fantasmas no es algo que se metiera sin justificación. Formaba parte de la vida de estos personajes.

P: Asako guarda el secreto durante gran parte de su vida. ¿Por qué se decide a contar a Yuko que tendría que haberse casado con Henry?

R: A corto plazo, simplemente quiere que Yuko se pare un momento y que no se lleve el bebé. Además, después de ocultar este secreto durante tanto tiempo, y con la tragedia que está asolando a los personajes, se siente culpable, como si de algún modo hubiera empujado la primera ficha de dominó. Por ello, cree que debe confesar para que su hermana sepa quién es realmente responsable de ello. Creo que es un acto heroico. Es un sacrificio porque espera salvar el bebé de Chester y Luz ofreciéndose a sí misma.

P: ¿Por qué crees que Yuko decide no matarla en ese momento?

R: Lo habría hecho si pudiera, pero hay una especie de misterio en torno a por qué no puede. En el episodio 10, se descubre a Henry encontrando una serie de números de sutras en una hoja de papel que Asako guarda en su bolsillo y que la protege. Eso es lo que ilumina en cierto modo a Henry para saber cómo luchar contra Yuko, el hecho de que estos sutras le otorguen protección. Incluso él había dudado de ese poder, pero tras encontrarlo en los bolsillos de Asako, se da cuenta de que esa es la respuesta. Le da la oportunidad de protegerle a él y de proteger a Chester en el último episodio.

Si echamos la vista atrás nos damos cuenta de que las palabras sagradas tienen mucho valor. En el episodio 2, Yamato-san entrega un sutra a Henry esperando que le proteja de un obake en Dakota del Norte, y Henry es un poco escéptico con ello. Sin embargo, si nos damos cuenta, siempre que hay sutras presentes, estos tienen cierto valor de protección. En el episodio 3, cuando Henry llega al campamento, Asako cuelga un ofuda en la barraca que lee “Nos protegerá” y, de hecho, Yuko nunca entra en ella. Unos episodios más tardes, en el sexto, cuando una Asako poseída por Yuko está ahogando a Chester, de pronto para porque se da cuenta de que el cementerio tiene sutras escritos en los trozos de madera que forman las tumbas.

P: ¿Por qué crees que Chester cambia de parecer en cuanto a deshacerse de Yuko?

R: Hay una evolución. Al principio incluso tiene que aceptar su existencia, y luego intenta alejarse de ella quemándola. Intenta muchas cosas para destruirla, pero creo que poco a poco entiende cuál es la naturaleza de un yurei y que no puede ser parada, que su hambre no puede ser satisfecha. Pero también encuentra una pequeña vía de escape. Encuentra un momento antes de que esa hambre existiera, el único modo de salvar a Yuko es revirtiendo el reloj y dándole la oportunidad de vivir ese momento perfecto, el momento más feliz de su vida antes de que todo se fuese al garete.

P: Chester y Henry pasan la mayor parte de la temporada enfrentados. ¿Qué dice el sacrificio final de Henry sobre la relación que tenían todo este tiempo?

R: Creo que Henry siempre pensó en Chester como su hijo, aun cuando no podía expresarlo en palabras o cuando fingía que no le importaba. A pesar de ello le quiere como a su propio hijo, aunque biológicamente no lo sea. Y ese sacrificio que hace habla más que cualquier cosa que pudiese hacer, porque Henry no se caracteriza precisamente por mostrar sus emociones. Hay un sueño precioso al final del episodio 10 con Henry y Chester en un barco. Representa a los dos diciéndose las cosas que nunca pudieron decirse, pero es simplemente la imaginación de Chester. Henry, en vida, nunca habría dicho esas cosas, pero Chester se da cuenta de que son palabras que Henry querría haberle dicho.

Originalmente habíamos escrito a Henry como un personaje mucho más hablador porque sentíamos la necesidad de expresar como se sentía, pero cuando vimos la interpretación de Shingo Usami, nos dimos cuenta de que debíamos darle menos, no más, porque emocionalmente podía mostrar mucho más diciendo menos. Puedes saber todo lo que siente simplemente mirando su cara.

P: ¿Qué significa que Yuko por fin pueda encontrar la paz en esta vida más allá, aquella en la que aún estaba embarazada de sus gemelos?

R: Es un final feliz para Yuko, pero creo que a la vez nos damos cuenta de cuán imposible es eso para el resto del mundo. Es una circunstancia muy concreta, una combinación de magia que te deja quedarte en el momento en que eres fotografiado y que te da la opción de salir de un cuerpo y entrar en otro. Necesitas esa combinación perfecta de dos circunstancias mágicas para que ocurra. Solo mediante la combinación de las habilidades japonesas de Yuko y la magia mejicana, mediante la unión de ambas culturas, se puede propiciar este fin, y creo que es un final muy americano, el matrimonio multicultural. Chester debe separarse de la tradición japonesa y la mejicana de su mujer para poder triunfar, pero realmente es algo que solo se aplica a Yuko.

P: Asako consigue liberarse de sus mentiras, tanto las que tienen que ver con Yuko como aquellas relacionadas con su hijo, pero ¿merece la pena haber perdido a Henry?  

R: Paga un precio muy alto. No solo pierde a Henry, en el epílogo vemos cuán pesada ha sido la carga de su culpabilidad durante esos cinco años. Parece haber envejecido considerablemente, por lo que en cierto modo acepta esa culpa. Lo hace para que la vida de Chester, Luz y su hijo pueda continuar.

P: ¿Considerarías que el final es feliz para los personajes que han sobrevivido?

R: Creo que es un final agridulce. Sobreviven y prosperan, y uno de los elementos que queríamos incluir en la historia del internamiento es el sufrimiento, pero también el modo en que consiguen resistir y salir de él. Los personajes que han sobrevivido han cambiado para siempre. Es una característica que llevan con mucho orgullo. Vemos cómo han evolucionado todos los personajes, vemos a Walt en una silla de ruedas y cómo Amy se radicaliza por el modo en que la ha tratado el país. Chester ha abrazado finalmente su cultura y la está transmitiendo a su hijo. Esta experiencia ha cambiado completamente a todos los personajes, pero creo que también se podría decir que han evolucionado de manera positiva ante sus vivencias durante el internamiento.

P: ¿Qué te enorgullece más conforme esta historia llega a su final?

R: Estoy muy orgulloso de poder hacer esta serie, de que hayamos podido contar una historia que no había sido narrada a esta escala anteriormente, algo que tiene tanto significado no solo para los japoneses americanos, sino para todas las personas que han estado influidas por la inmigración, lo cual realmente se refiere a todo el mundo. No solo queríamos informar a las personas, también deseábamos emocionarlas e influirlas para que trabajen la empatía no solo dirigida hacia los afectados por ese episodio, sino a todos los inmigrantes del presente, pasado y futuro.

Carolyn Koo para AMC.com

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